Digitalización para Pymes

«En Internet, las pymes con más éxito son aquellas capaces de satisfacer necesidades concretas que los grandes Marketplaces no puedan aportar»

La vida cotidiana se ha transformado de una manera sumamente rápida, gracias a la presión ejercida por la actual crisis sanitaria, este acontecimiento mundial obligó a las empresas, al comercio, la educación, tecnología y en general a todo sector de la vida social cotidiana a innovar, transformarse o perecer, es por ello que se debe pensar en cómo adecuarse a una nueva forma de realizar todo tipo de procesos, comprendiendo que el distanciamiento social obligatorio, sería el factor clave, por ello la digitalización es la solución el reto a solventar, con el cual mantener una permanencia dentro del comercio mundial, obligado así a las Pymes a generar su posicionamiento digital, para ser competitivos ante las grandes empresas.

La digitalización de los procesos, engloban un sin número de beneficios, sin embargo, no es tarea fácil transformar o migrar las actividades empresariales a un entorno digital, es por ello que los expertos de Cosmomedia, consideran una serie de aspectos con los que una Pyme puede comenzar a adentrarse a la digitalidad, tomando en cuenta que no solo se trata de encontrarse dentro de la conversación por medio de las plataformas, sino que se debe buscar la interacción, comercio, optimización, capacitación entre otros aspectos.

El primer paso para comenzar con una digitalización, es considerar de antemano cuál es punto de partida, de igual modo el conocer el sector en que se busca desarrollar dará las opciones y estrategias a integrar, buscando un valor competitivo que se pueda desarrollar a corto, mediano y largo plazo, y que brinde la oportunidad de generar un plan estratégico el cual se debe pensar para que genere una retroalimentación constante.

El contar con un sector estudiado por el cual comenzar a desarrollarse, permitirá ofrecer un aspecto por el cual destacar. José Manuel Fuentes CEO de Cosmomedia señala: “En Internet, las pymes con más éxito son aquellas capaces de satisfacer necesidades concretas que los grandes Marketplaces no puedan aportar”.

Bajo el mismo sentido PoweDate, considera que la digitalidad permite convertir los procesos en datos, lo que beneficia a las empresas para que puedan comprender los procesos empresariales como datos y no como objetivos a resolver, este aspecto se vuelve relevante, ya que los datos permiten evidenciar de manera clara qué acciones son benéficas y cuáles no, así como generar una retroalimentación, con la cual trabajar en mejoras de procesos.

Otro aspecto importante es considerar una inversión dentro de la capacitación de los empleados, ya que no solo se trata de encontrarse dentro del mundo digital haciendo uso de la mejor tecnología y buenas estrategias, sino que se debe tomar en cuenta al personal que desarrollarán las estrategias a implementar, e invertir en su capacitación constante, con la finalidad de mejorar aún más los procesos y llegar a un posicionamiento competitivo dentro de la Digitalización

Dentro de esta capacitación constante, es importante no solo genera desarrollo dentro del uso de la tecnología, sino que también es importante tomar en cuenta un aprendizaje del sector, ya que el conocer de términos, hermanitas y manuela de uso, será esencial para un mejor desarrollo laboral que se traducirá en mejoras empresariales, que permitirán generar confianza dentro del sector, y que los consideres percibirán, obteniendo mejore experiencias de compra, logrando una lealtad orgánica.

Directivos que entiendan y lideren

Liderar a personas más inteligentes puede ser un escenario que intimida incluso a los más experimentados. Sin embargo, es más una oportunidad que un obstáculo.

Sin importar la situación en la que te encuentres, cuando estás por hacer algo, siempre tienes, al menos, dos opciones. Incluso pueden ser tan sencillas y obvias como: lo haces o no lo haces. Cuando estás al frente de uno o varios equipos de personas, lo vives todo el tiempo. La presión puede ser muy fuerte, porque en tus manos está conseguir resultados valiosos a través de tus colaboradores.

Mucho está en juego, ¿cierto? Entonces, ¿por qué crees que todavía existen directores o gerentes que dudan en contratar a personas más capaces que ellos? Si es verdad que los objetivos están dirigidos a mejorar y convertirse en una organización (y, por lo tanto, un profesional) más fuerte, más cerca de la excelencia, entonces sus elementos deben tener esas características también.

Todo se reduce a un asunto de intimidación y seguridad en uno mismo. Si un jefe contrata a una colaboradora más talentosa que él, tal vez lo aborden preguntas como si esa persona le quitará su trabajo en poco tiempo o si pronto dudará de sus capacidades de liderazgo; o quizá perderá el respeto. Siendo honesto, pienso que este tipo de inquietudes hablan más de quien las formula, y es importante sacudirlas de inmediato para concentrarse en la única pregunta que es válida en estas situaciones: ¿cómo dirigir a personas más inteligentes que uno? Con estos consejos espero ayudar a responder:

Dile no a la intimidación

Es perfectamente natural sentirte intimidado. Sin embargo, intenta alejarte de esa sensación tan pronto como te sea posible. La inteligencia en tus colaboradores deberías considerarla como una herramienta para alcanzar el éxito colectivo, no una razón para que te ataquen de manera individual. Para estar al frente de un equipo también se necesita mucho talento y buenas ideas, por algo estás ahí. El proceso de selección es la clave para su éxito y para el de su empresa. No hay nada tan importante para su futuro como su habilidad en seleccionar a la gente más adecuada para el puesto. “

Recuerda que tú también fuiste uno de ellos

Al ponerte en los zapatos de las personas que integran a tu equipo (o varios equipos), entenderás también qué es lo que esperan de ti. ¿Recuerdas las expectativas que tuviste de tus antiguos jefes? En realidad, nadie espera que tengas todas las respuestas, pero sí que estés abierto a nuevas propuestas o a la creatividad de los más jóvenes o inexpertos. Piensa qué es lo que más apreciaste de tus superiores en aquel entonces y encontrarás el camino para dar buenas direcciones.

Abre un canal de dos sentidos para el aprendizaje

Si reconocemos el talento de los recién llegados, entonces podemos aprender de ellos. Y esta es una oportunidad que debe aprovecharse sin dudarlo: alguien nuevo tendrá conocimientos frescos de su área para innovar y quien está al frente contará con la experiencia que permite resolver asuntos de organización, crisis o colaboraciones en distintas escalas. Hazle saber a tu personal que quieres aprender de sus conocimientos y que quieres dar aportes valiosos a su talento.

Comprende y abraza lo que significa ser un líder

Si estás en un puesto de dirección, entonces debes entender que tu papel en la empresa ha cambiado. Como dice Lynda Hill, profesora en la Harvard Business School y coautora del libro Being a Boss: ya no eres un colaborador individual, sino un facilitador de las condiciones para que los demás se desarrollen, exploren su potencial y, por lo tanto, se conviertan en colaboradores valiosos que lleven a la empresa a sus objetivos.

Ahora que estás al frente, tienes al menos dos opciones: rodearte de personas que cumplirán con el mínimo para sacar la chamba y que te mantengan en tu zona de confort, o elegir aquellas que aportarán valor genuino a tu empresa y que te ayudarán a crecer en tu papel de liderazgo.

 

Retos para RH en el 2022

Especialistas prevén que durante el próximo año los desafíos para las áreas de capital humano estarán vinculados con la experiencia del empleado, la capacitación de los colaboradores y la diversidad e inclusión

Después de casi dos años de pandemia, las lecciones en materia de gestión de talento son muchas y el 2022 será el escenario en el que estos aprendizajes deben aterrizarse en acciones concretas. Desde la experiencia del empleado hasta el reentrenamiento de la fuerza laboral, las áreas de Recursos Humanos tienen una lista de retos importantes el siguiente año.

Olivia Segura, socia de Asesoría en Capital Humano y Cambio Organizacional de KPMG México, afirma que uno de los mayores retos en gestión de talento para el siguiente año está vinculado con hacer parte de la estrategia de negocio los temas de diversidad e inclusión y no sólo limitarlo a un asunto de responsabilidad social.

“Cuando Recursos Humanos está consciente de la importancia de la diversidad, la inclusión y la equidad entre la fuerza de trabajo, define una propuesta de valor donde la gente percibe esta inclusión, vive esta diversidad y equidad en las oportunidades de desarrollo”, expone la especialista.

Pero ese no es el único desafío, la emergencia sanitaria por la Covid-19 también impactó en las expectativas e intereses de los colaboradores, incrementando la importancia en temas como la salud mental y física o la flexibilidad. En ese sentido, Olivia Segura considera que uno de los retos en 2022 es rediseñar la experiencia del empleado.

“Las empresas líderes en Recursos Humanos están actualizando su propuesta de valor para que obedezca a la diversidad de la fuerza laboral, para que obedezca a esta experiencia distinta que cada uno de los colaboradores quiere vivir en las empresas y, sobre todo, que están solicitando para mantenerse comprometidos con la organización”.

Gerardo García Rojas, director de consultoría en Compensaciones de Mercer México, coincide en la importancia de replantear la experiencia del empleado durante el 2022. Antes de la pandemia, medir el compromiso era una prioridad, pero a partir del próximo año, esto no será suficiente.

“Si hoy en los negocios estamos en una economía de experiencias eso se tiene que trasladar a la experiencia del empleo desde cómo me tratan desde que estoy aplicando las pruebas para entrar, además de pensar cuáles son las necesidades que tiene cada individuo de los diferentes segmentos a los cuales pertenecen. El rol de Recursos Humanos es poder facilitar la experiencia del empleado para garantizar que la satisfacción permanezca y se atraiga al mejor talento”, afirma.

Además, el uso de Inteligencia Artificial y herramientas para el análisis de datos serán fundamentales para predecir comportamientos de los empleados y diseñar distintas experiencias acordes a los intereses y necesidades de cada generación. En ese sentido, García Rojas opina que la fuerza laboral valora los espacios empáticos, enriquecedores, con sentido de pertenencia y eficientes, elementos que deben considerarse en la oferta de valor.

Para Patricia Barra, head of Wealth de AON para América Latina, el rediseño de los paquetes de compensación es uno de los mayores desafíos en materia de gestión de talento porque los elementos más valorados por los trabajadores han cambiado a raíz de la pandemia.

“La pandemia nos ha enseñado que cada uno de nosotros somos diferentes y tenemos necesidades totalmente diferentes. Hoy los esquemas de compensación total se quedan cortos porque en muchas empresas son rígidos o han sido diseñados sin considerar las distintas necesidades de los colaboradores”, subraya la especialista.

En 2022 las organizaciones deben preguntarse qué tan diversos son sus esquemas de compensación. En ese tenor, los programas deben ser más flexibles con beneficios que atiendan los distintos intereses de los empleados.

 

Un buen liderazgo para nuestro rendimiento y nuestra propia salud.

El liderazgo es un talento muy especial: el talento para influir decisivamente en los demás a través de la credibilidad, de nuestra autenticidad. No estamos hablando de un rol, de ser jefe, sino de ganarnos la confianza y el compromiso de los demás, empezando por nuestro liderazgo interno.

¿Qué podemos hacer para gobernarnos mejor? Empecemos por interiorizar una serie de hábitos neuro-saludables, beneficiosos para nuestro cerebro. El cerebro humano es el órgano más fascinante del universo, el de mayor potencia. Sin embargo, también es el órgano más vulnerable. Más allá de lo heredado, el temperamento, tenemos una gran capacidad (si queremos) de aprender, de entrenarnos, de desarrollar nuevos hábitos.

Más concretamente, el liderazgo, desde la neurociencia, nos enseña que hay nueve hábitos o comportamientos repetidos que deberían configurar nuestra “segunda naturaleza”, en palabras de Aristóteles. Estas pautas se dividen en tres bloques:

A) HÁBITOS DE DIRECCIÓN:

Activar el propósito, el para qué, el sentido para inspirarnos personalmente e inspirar a los demás. “El liderazgo es la intersección entre visión y valentía”.

Elegir lo que pensamos. Los humanos corremos el riesgo de dispersarnos y de darle demasiadas vueltas a las cosas. Dejarlas para más adelante, la procrastinación, lleva a la ansiedad, por eso debemos elegir la idea que más nos conviene.

Visualizar lo que queremos conseguir, desde la imaginación, las expectativas, las profecías que queremos que se cumplan, y suelen hacerlo. Nuestro cerebro procesa más rápido las imágenes que las palabras. 

B) HÁBITOS DE CUIDADO:

Relajar la mente, que nunca está quieta, a través del mindfulness y el sueño reparador. El estrés negativo ataca al cerebro y lo destruye materialmente. La falta de sueño provoca fiebre y catarros a corto plazo y a largo mata, reduciendo drásticamente la esperanza de vida.

Alimentar bien el cerebro evitando los venenos blancos. La nutricionista australiana Catherine Itsiopoulos recomienda dieta mediterránea y equilibrio. Hay que tener cuidado con el azúcar (no debería alcanzar el 10% de la ingesta calórica, según la OMS), la sal, la harina y los lácteos.

Practicar el ejercicio adecuado. El ejercicio desarrolla el hipocampo, clave para la memoria y el aprendizaje. Debemos practicar al menos dos horas y media semanales de actividad moderada.

C) HÁBITOS DE DESARROLLO:

Conversar con personas tónicas y no tóxicas. La soledad mata y los seres tóxicos nos vampirizan. Una buena conversación nos mejora como personas y como líderes. 

Contagiarnos del optimismo inteligente. Como estilo explicativo de la realidad, el optimismo beneficia a nuestro cerebro y el pesimismo nos vuelve indefensos, lo que afecta al sistema inmune que nos defiende de los virus. 

Aprender continuamente desde la voluntad: lecturas frecuentes, curiosidad permanente, deseo de saber más y de forjar nuestro carácter. El liderazgo que no se aprecia se deprecia.

Más allá de conocer estos hábitos, que pueden parecer de sentido común, debemos reconocer nuestras fortalezas y oportunidades de mejora, para mantener aquellas y aprovechar estas. Si es acompañado de un coach, mejor. Practicar los hábitos neurosaludables nos dará más y mejor vida.