Un líder no es aquel que tiene capacidad para mandar. Ser líder es mucho más que ocupar un puesto de dirección o gerencia, ser líder es tener la capacidad de que un equipo de trabajo funcione de manera efectiva tanto a nivel global, como grupal, como individual.
El líder es una figura clave en el desarrollo efectivo de una empresa. Tanto en empresas pequeñas como en grandes empresas, siempre es necesario llevar a cabo una adecuada gestión de los proyectos, para lo cual, la configuración, coordinación y seguimiento de los equipos de trabajo es algo imprescindible. El líder, es la cabeza visible de ese equipo y el encargado de asegurar que todas las piezas que lo conforman funcionen en un perfecto engranaje.
CUALIDADES DE UN BUEN LÍDER: 10 INDISPENSABLES
- Comunicación efectiva
Para ejercer un liderazgo con efectividad, tienes que saber comunicarte con tu equipo. Así, la capacidad de transmitir tus ideas, de forma clara y eficaz, es necesaria para la gestión de talento y desarrollar las estrategias requeridas en el negocio. También la habilidad oratoria, saber atrapar a las escuchas, redactar correctamente y utilizar los medios de comunicación ideales a cada labor.
- Saber escuchar
Todo líder tiene que desarrollar la cualidad de escuchar a las demás personas, ya sean clientes, proveedores, socios y, sobre todo, a sus colaboradores para generar un buen ambiente de trabajo. Esto les permite identificar qué es lo que el otro espera de la relación comercial, sus necesidades o deseos, con la finalidad de entregarles respuestas a cada petición y resolver sus dudas.
- Priorizar
Si se quieren obtener los objetivos establecidos en la empresa, el líder deberá desarrollar la capacidad de organizar sus labores para cumplir con las actividades calendarizadas en el día y atender los asuntos más urgentes.
- Visionarios
Un líder debe tener la facultad de ser visionario, adelantarse a las tendencias y necesidades de la industria donde se desempeñe. Al visualizar el futuro de la organización, el líder tendrá las herramientas para desarrollar las estrategias del negocio, definir objetivos y poder guiar, en cada toma de decisión, la dirección ideal de la empresa.
- Estrategas
En este sentido, el líder tiene que ser un gran estratega para evaluar factores de la empresa como el contexto, la situación y los objetivos con el fin de desarrollar las estrategias a seguir.
- Resiliencia
En un mundo cambiante y acelerado, el ser resiliente no sólo te permitirá saber adaptarte y superar las adversidades, también podrá incentivarte a conseguir resultados positivos y mejorar tu actuación en situaciones futuras que se parezcan.
- Energía positiva
Actuar bajo una energía positiva motivará a tus colaboradores y promoverá el trabajo óptimo en equipo para crear un bienestar laboral.
- Ser un aliado
Esto significa que el líder debe crear relaciones, de respeto, aceptación y confianza, sostenibles a largo plazo, para que pueda aprovechar todo el potencial de sus aliados. Así, con clientes, colaboradores, socios, proveedores u otros actores.
- Saber delegar
Saber delegar la toma de decisiones ayudará al líder a aprovechar mejor las habilidades de cada colaborador, a la vez que estos van desarrollando un gran compromiso con la empresa. Al delegar correctamente, las empresas pueden mejorar su productividad y se agilizan los procesos. También se estimula la creatividad del empleado y estos aprenden a confiar en sus decisiones.
- Impulsar el crecimiento profesional
Pensando en el bienestar laboral de una organización, un buen líder debe velar por el crecimiento de los miembros de su equipo, por lo que tiene que motivarlos a capacitarse, darles seguimiento y guiar su desarrollo. Con ello, se podrán obtener mejores resultados en la empresa y los colaboradores generarán un mayor sentido de pertenencia al sentir que son apreciados y apoyados por su jefe.
Lograr un liderazgo correcto tiene un efecto importante en el desempeño de los colaboradores y el ambiente laboral, por lo que un líder tiene que asegurarse de desarrollar cualidades como las enlistadas, buscar la mejora continua, así como mantenerse actualizado, para alcanzar el éxito profesional y llevar a la organización al siguiente nivel.