3 de cada 10 empresas son dirigidas por mujeres

A pesar de la baja representatividad de las mujeres, las empresas que apuestan por el talento femenino de benefician por la diversidad.

En México, solo el 35% de las empresas están dirigidas por mujeres, de acuerdo con el informe “Mujeres en los Negocios 2021”, lo cual pone en evidencia los sesgos, roles de género aprendidos, las brechas para acceder al trabajo remunerado y el machismo que aún persiste en el mundo empresarial.

“Las mujeres que entramos al juego profesional entramos a un juego de hombres, donde las reglas las pusieron ellos y aprendemos a jugar con esas reglas. Pero las vamos cambiando ya estando adentro”, aseguró Guadalupe Phillips, directora general de Ingenieros Civiles Asociados (ICA) durante el conversatorio “Mujeres Protagonistas del Cambio: Transformando el Mundo”.

Por su parte, María Ariza, actual directora general de la Bolsa Institucional de Valores (BIVA), abundó que a pesar de que hay pocas empresas dirigidas por mujeres, las compañías que apuestan por el talento femenino se benefician de la diversidad, pues registran un rendimiento 35% superior.

Durante el panel, Ninfa Salinas, presidenta del consejo directivo de Fundación Azteca y también presidenta y fundadora de Grupo Dragón, destacó la importancia de castigar e investigar las denuncias de acoso sexual.

“No importa que lleves 200 años trabajando en la empresa o si eres el amigo del jefe, si resultas culpable te vas de la empresa”, expresó Salinas.

Además, criticó el estereotipo de “supermujer”, el cual obliga a las mujeres a ser productivas en su trabajo, verse bien y encargarse del cuidado del hogar; eso peligroso pues resulta abrumador, advirtió la empresaria.

“Las mujeres se han ido abriendo espacios en el mundo empresarial, tienen sueños que no tenían hace 20 años. Entonces es nuestra obligación generar conversaciones distintas sobre cómo queremos enfrentar estos nuevos papeles de la mujer”, destacó Ninfa Salinas.

Tendencias de los negocios para 2022

En todos los sectores, las organizaciones se enfrentan a una rápida transformación. Además, hay que hacer frente a enormes cambios y desafíos globales, como el cambio climático y los cambios en el poder político y económico.

Estas ocho tendencias principales ofrecen una imagen de cómo están evolucionando las operaciones empresariales para adaptarse a nuestro mundo rápidamente.

OPERACIONES SOSTENIBLES Y RESISTENTES

Todas las organizaciones deben tratar de eliminar o reducir los costos medioambientales de su actividad. La des-carbonización de la cadena de suministro es un punto de partida razonable, pero las empresas con visión de futuro están mirando más allá de la cadena de suministro para mejorar la sostenibilidad en todas las operaciones empresariales. Y, por supuesto, la sostenibilidad está vinculada a la resiliencia, ya que esta significa ser capaz de adaptarse y sobrevivir a largo plazo. Cualquier empresa que ignore la sostenibilidad no tendrá éxito en esta época de consumo consciente.

EL EQUILIBRIO ENTRE TRABAJADORES HUMANOS Y ROBOTS INTELIGENTES

En la actualidad disponemos de robots y sistemas de inteligencia artificial (IA) cada vez más capaces que pueden asumir tareas que antes realizaban los humanos. Esto deja a los empresarios con algunas preguntas clave: ¿cómo encontrar el equilibrio entre las máquinas inteligentes y la inteligencia humana? ¿Qué funciones deben cederse a las máquinas? ¿Qué funciones son más adecuadas para los humanos? No cabe duda de que la automatización afectará a todos los sectores, por lo que los directivos de las empresas deben preparar a sus organizaciones -y a sus empleados- para la cambiante naturaleza del trabajo.

EL CAMBIO DE LA RESERVA DE TALENTO Y DE LA EXPERIENCIA DE LOS EMPLEADOS

La forma de trabajar está evolucionando, con la incorporación de más jóvenes al trabajo, más trabajadores autónomos y más trabajadores a distancia. En su libro The Human Cloud (La nube humana), Matthew Mottola y Matthew Coatney afirman que el empleo tradicional a tiempo completo será cosa del pasado, ya que las organizaciones pasarán a contratar a personas con contrato, y esos contratistas trabajarán a distancia.

ORGANIZACIONES MÁS PLANAS Y ÁGILES

Tradicionalmente, las organizaciones han sido muy jerárquicas y rígidas en sus estructuras. Pero esto está cambiando, ya que los líderes reconocen la necesidad de estructuras más planas y ágiles que permitan a la empresa reorganizar rápidamente los equipos y responder al cambio. También es, en parte, una respuesta a la naturaleza cambiante del trabajo, en particular la proliferación de trabajadores autónomos y a distancia.

Esta es la era de las estructuras organizativas más planas, que se parecen más a comunidades flexibles que a una estructura piramidal descendente.

AUTENTICIDAD

Los consumidores actuales buscan una conexión más significativa con las marcas. Y esta necesidad de conexión ha dado lugar a la autenticidad como tendencia empresarial por derecho propio. La autenticidad ayuda a fomentar las conexiones humanas, porque, como humanos, nos gusta que las marcas (y los líderes empresariales) muestren importantes cualidades humanas como la honestidad, la fiabilidad, la empatía, la compasión, la humildad y, tal vez, incluso un poco de vulnerabilidad y miedo. Queremos que las marcas (y los líderes) se preocupen por los problemas y defiendan algo más que la obtención de beneficios.

NEGOCIOS CON PROPÓSITO

Vinculada a la autenticidad, esta tendencia consiste en garantizar que su organización existe para servir a un propósito significativo, y no sólo para dar beneficios a los accionistas. El propósito define por qué existe la organización. (No lo que la organización es o lo que hace o para quién. Por lo tanto, el propósito es diferente a la misión y la visión). Es importante que un propósito sólido tenga la promesa de transformar o luchar por algo mejor, ya sea un mundo mejor, una forma mejor de hacer algo o lo que sea importante para su organización.

COMPETICIÓN E INTEGRACIÓN

Vivimos en una época en la que prácticamente todo se puede conseguir mediante la subcontratación. El mundo empresarial global nunca ha estado tan integrado. Y es un buen trabajo, porque la necesidad de trabajar juntos para resolver los principales retos empresariales (por no hablar de los mayores retos de la humanidad) es grande. De hecho, en el futuro, será cada vez más difícil tener éxito sin una colaboración realmente estrecha con otras organizaciones. En la práctica, esto significa una mayor integración de la cadena de suministro, una mayor integración de datos y el intercambio de datos entre organizaciones, e incluso la cooperación entre competidores.

NUEVAS FORMAS DE FINANCIAMIENTO

Las formas en que las empresas pueden generar financiación también están cambiando. Han surgido nuevas plataformas y mecanismos para conectar a las empresas con los inversores y donantes: pensemos en el crowdfunding, las ofertas iniciales de monedas (ICO), la tokenización y las sociedades de adquisición con fines especiales (SPAC). Muchos de estos nuevos métodos están impulsados por el movimiento de las finanzas descentralizadas, en el que los servicios financieros, como el préstamo y el comercio, tienen lugar en una red de pares, a través de una red pública descentralizada de blockchain.

Además de estas ocho tendencias, en 2022 también habrá tendencias tecnológicas transformadoras, como la inteligencia artificial y la creciente digitalización, para las que toda empresa debe estar preparada.

 

Las mujeres en las empresas

En los últimos años, los debates acerca de la igualdad de género han tenido un especial protagonismo en todos los ámbitos. Entre otros aspectos, se ha subrayado la baja representación del liderazgo femenino en empresas y puestos de responsabilidad pública.

Las cifras aportan pruebas significativas: actualmente, a pesar de que las mujeres representan el 43% de la fuerza laboral a nivel mundial, solo el 36% de los cargos gerentes del sector privado y de los puestos de funcionariado del sector público son mujeres. Con respecto a los cargos en consejos de dirección, el porcentaje desciende al 18,2 % a escala global.

Y no parece que sea una cuestión de mayor presencia histórica de los varones en el mercado de trabajo; por cada 100 hombres promocionados a gerentes, solo 72 mujeres son ascendidas.

No obstante, los datos también indican que el número de mujeres en puestos de mando se está incrementando, impulsado por una intensificación de las políticas proactivas de igualdad en el ámbito público y una mayor concienciación sobre el impacto positivo del liderazgo femenino en el mundo empresarial. Así,en los últimos 16 años, la cifra de directivas ha crecido 10 puntos porcentuales a nivel global, de acuerdo con el estudio Women in Business 2020, de Grant Thornton.

DATOS SOBRE LA SITUACIÓN DEL LIDERAZGO FEMENINO EN LOS ÚLTIMOS AÑOS

Las cifras mencionadas hablan de una desigualdad que no se corresponde con la realidad formativa. Según el informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) Datos y cifras del Sistema Universitario Español, de 2020, el porcentaje de mujeres matriculadas en la universidad en el curso 2018/2019 fue del 57,2%. Además, terminan sus estudios superiores con una nota media superior a la de los compañeros varones: 7,35 frente a 7,06.

Sin embargo, en el mundo laboral, la dificultad en la conciliación familiar, el “techo de cristal” o los prejuicios de género son algunas de las razones que obstaculizan el desarrollo del liderazgo femenino.

La Organización Mundial del Trabajo, organismo perteneciente a las Naciones Unidas, alerta de que existen desigualdades incluso cuando las mujeres acceden a las posiciones de mando. Según los datos del informe The Business Case for Change, se produce una segregación por género. Así, mientras que las mujeres en puestos de mando tienden a concentrarse en ciertas áreas de actividad, como Recursos Humanos, Administración, Marketing y Ventas, apenas tienen representación en otras como Operaciones, Investigación y Desarrollo o Finanzas. En estos últimos ámbitos, existe una gran presencia masculina y, a menudo, son las posiciones que actúan como trampolín para ascender a puestos superiores.

En GDI buscamos la inclusión, que nuestro equipo este formado por personas excepcionales, sin importar el género.

Motivamos a nuestras mujeres a ser mejores día con día, siendo líderes a seguir, demostrando que todos podemos ejercer las mismas tareas y crecer como personas y profesionistas.