Un entorno laboral no adecuado, tanto virtual como presencial, puede influir negativamente en la salud mental de las personas. El estrés se ha convertido en la principal afectación a la salud producto de cargas de trabajo excesivas, acoso psicológico, mala convivencia, entre otros factores. Incluso, la Organización Mundial de la Salud -OMS- se comprometió a declarar el estrés laboral como una enfermedad autónoma, que quedará en firme a partir del 2022; el fin de hacerlo oficial es involucrar a los países a que definan protocolos de diagnóstico y rutas de tratamiento para los pacientes.
Sin embargo, el estrés no es la única afectación que genera un ambiente laboral no óptimo. De acuerdo con el Estudio Nacional de Salud Mental (2015), en adultos entre 18 a 44 años, y mayores de 44 años, se encontró que los problemas de salud mental están de manera particular en el espectro de los síntomas de ansiedad y depresión, y que el tema laboral es unos de los factores causantes.
Los entornos laborales mentalmente sanos no solo benefician a los colaboradores. De acuerdo con la Fundación Saldarriaga Concha, “la promoción de la salud mental en el trabajo y el apoyo a las personas que sufren trastornos psiquiátricos hacen más probable la reducción del absentismo laboral, el aumento de la productividad y la obtención de beneficios económicos para el empleado y las empresas”.
Frente a lo anterior, resulta importante para las organizaciones identificar cuáles son los aspectos laborales que más inciden en la salud mental de sus colaboradores, y generar planes de acción que permitan mitigarlos y construir entornos laborales seguros. Según la OMS los riesgos más frecuentes son:
Una parte esencial de la vida de las personas es su trabajo, y este se encuentra ligado a aspectos sociales y familiares. Por esto, una buena relación con el entorno laboral favorece el desempeño del colaborador, no solo en su trabajo, sino en otros aspectos esenciales de su cotidianidad. Las empresas pueden aplicar medidas eficaces para promover la salud mental en el lugar de trabajo, aumentar con ello la productividad y al mismo tiempo mejorar la calidad de vida de sus trabajadores, quienes pasan el mayor tiempo de su día a día con sus jefes, colegas y compañeros.
En los últimos años se ha venido abordando la importancia de cuidar la salud mental de los colaboradores en las áreas de Gestión Humana. Es importante seguir trabajando en pro de favorecer el bienestar de las personas y consolidar entornos laborales saludables, que le permitan al colaborador desempeñarse de manera adecuada y alcanzar un crecimiento personal satisfactorio.